Ellos no quiebran, cierran los ojos y voltean. No, no quiebran, no se los siente. Frio y silencio, distancia es lo que ataca. Se sintio de piedra, y lo quise abrazar para calmar, no se si adentro de el o si adentro mio. Calmar. Y llovia, llovia sin parar, rayos y centellas, tormentas. Y el mar. Nadie lo vio llorar. Nadie lo escucho. Nadie imagino.
Esas monedas que compran numeros, que rifan sonrisas, que se olvidan de la poca inmensidad que llega un amanecer sin tiempo, y al final sin historia. Todo se va como agua entre las manos, limpiando el dolor, limpiando las heridas, dejando las huellas de lo que quiso emitir su adios.
Solo sueña para que pueda soñarte. Podria esconderme todo el dia de todos los dias, tapada de pies a cabeza, solo por soñarte una vez mas. Te quise enterrar y solo cai en mi propio ataud. Te quise tapar y solo escondi en quien sabe donde lo que mas dolia, y sigue ahi latente, esperando saber el por que, y no se si quiera saberlo, no se si quiera averiguarlo. Estabas tan lejos, y te gritaba... y no escuchabas que siempre fue tu nombre, tu piel, tu mano, vos.
Podria admirarte la vida entera, sin embargo me rasco la cabeza pensando para acordarme cada centimetro tuyo, y tus gustos, si has cambiado y me se siente tan igual a mi, a vos, a mi. Sos mi historia y ya no te puedo escribir. Te invente y ya no puedo controlarte. Quiero que seas algo mas que este estigma en mi piel. Quiero arrastrar mil y una sonrisas para vos y que las historias nunca se terminen al despertar, que sigas haciendome soñar...
Muchas gracias
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